Schizandra
La Schizandra (Schizandra chinensis) es una planta originaria de China y Rusia, cuyos frutos se utilizan en la medicina tradicional por sus diversos beneficios para la salud. Consumir cápsulas de Schizandra puede ofrecer varios beneficios debido a sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y adaptógenas.
Adaptógena
La Schizandra es conocida como un adaptógeno, lo que significa que ayuda al cuerpo a adaptarse al estrés, mejorando la respuesta a situaciones estresantes y promoviendo un equilibrio general en el organismo.
Mejora la energía y vitalidad
Puede ayudar a aumentar los niveles de energía y reducir la fatiga. Se cree que mejora la resistencia física y mental, lo que la convierte en un complemento útil para quienes sufren de agotamiento o estrés constante.
Propiedades antioxidantes
Los compuestos antioxidantes presentes en la Schizandra ayudan a combatir los radicales libres, lo que protege las células del daño y puede retrasar el envejecimiento celular.
Apoyo al sistema inmunológico
Se ha demostrado que la Schizandra puede estimular el sistema inmunológico, ayudando a proteger al cuerpo contra infecciones y enfermedades.
Mejora la función hepática
La Schizandra se ha utilizado tradicionalmente para promover la salud del hígado, ayudando en la detoxificación del organismo y mejorando su función en general.
Salud mental y cognitiva
Se cree que la Schizandra mejora la función cognitiva, aumentando la concentración y la memoria. También puede ayudar a reducir la ansiedad y mejorar el estado de ánimo.
Equilibrio hormonal
Al ser un adaptógeno, la Schizandra también puede influir positivamente en el equilibrio hormonal, lo que beneficia tanto a hombres como a mujeres en diversas etapas de la vida.
Propiedades antiinflamatorias
Sus compuestos pueden ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo, lo que puede ser útil en el tratamiento de enfermedades inflamatorias crónicas.
Presentación:
60 Cápsulas.
Modo de uso:
Consumir 2 capsulas diarias con abundante agua.
Se recomienda tomar por la mañana junto con el desayuno o 30 a 60 minutos antes de hacer actividad física.